Normalmente no me interesa nada que piensan los otros sobre mí. Para mí, lo más importante es como me siento en general. Si tengo ganas de llevar una minifalda...bueno. Y si tengo ganas de llevar algo muy serio, por qué no?
Pero lo que pasa es que vivimos en una sociedad con normas y reglas. Algunas veces es mejor aceptar estas reglas. Por ejemplo, si eres profesora no puedes llevar una minifalda de color verde chillón.
Yo por ejemplo, me siento todavía muy jóven. Muchas veces me siento casi infantil. Pero si pienso en mi edad y en mi madre y que ella ya estaba casado y tenía hijos en mi edad, noto que ya tendría que ser adulta.
Cuando era niña las personas que tenían más que 50 años para mí eran viejos! Muy viejos...ya abuelos. Pero ahora, como mi madre ya tiene 54 años me parece una tontería pensar que sea vieja o que ya sea abuela.
La edad es un tema sobre que muchas personas no quieren hablar. En nuestra sociedad envejecerse es algo muy negativo. Lo entiendo, claro que queremos vivir para siempre. Pero muchas personas olvidan lo que significa ser viejo. Ser viejo significa que ya has vivido muchos años en este mundo, y que has hecho muchas experencias. Esto no siempre es evidente. Entonces vemos que envejecerse no sólo es algo negativo.
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